El equilibrado industrial, tanto dinámico como estático, evita vibraciones y desajustes en dispositivos mecánico. Posteriormente, estas vibraciones serán origen de averías y de bajos rendimientos.
Por ello, el equilibrado de toda aquella pieza sometida a altas revoluciones, capaz de generar momentos de inercia y vibraciones no deseadas, es posiblemente la actuación de mayor rentabilidad, dentro del mantenimiento y ajuste de máquinas y equipos industriales.